Lavamos y secamos bien el pollo troceado. Prepararemos el marinado con las hierbas, el pimentón, la sal, la pimienta, el zumo y la ralladura de limón, 1 diente de ajo y 2 cucharadas de aceite de oliva. Untamos con esta mezcla el pollo, lo guardamos en una bolsa zip y dejamos marinar en la nevera, si puede ser 24 horas.
Calentamos el horno a 125 grados. Sacamos el pollo del marinado y lo mezclamos la harina de maíz, la levadura, la sal y la pimienta. A continuación, los ponemos en una bandeja de horno y horneamos durante 30 minutos. Después, subimos la temperatura a 240ºC, en función grill, y horneamos hasta que tengan un aspecto dorado y crujiente.
Mientras, confitamos los dientes de ajo en una sartén con aceite de oliva virgen extra a fuego mínimo. A continuación, añadimos la miel, la mostaza, la salsa Perrins, el vinagre y un poco de pimienta. Removemos a fuego lento hasta conseguir una salsa espesa.